El puente se alza como un punto clave en el recorrido, permitiendo que el sendero principal continúe sobre el tajamar, integrando el paisaje y la infraestructura en una misma experiencia. Fue diseñado y construido en la segunda edición del Festival de la Madera 2024, en un taller dirigido por el estudio finlandés Lunden, en colaboración con estudiantes de arquitectura de la UDELAR y la UCU.
Su estructura responde a un método paramétrico, un enfoque de diseño basado en algoritmos que permite modelar formas complejas con precisión, optimizando el uso del material y la resistencia estructural. Cada pieza del puente fue concebida en función de parámetros específicos, generando una geometría fluida que dialoga con el entorno.
El puente cruza sobre un tajamar, una represa de pequeño porte creada para la acumulación de agua de lluvia, favoreciendo la conservación hídrica y la biodiversidad del ecosistema. La integración del puente con este cuerpo de agua refuerza la conexión del sendero con el paisaje natural del parque.
Construido en madera de pino Grandis, una especie cultivada en la región, el puente pone en valor los recursos locales y las posibilidades constructivas de la madera. Su diseño y materialidad consolidan un vínculo entre tradición y experimentación, convirtiéndolo en un hito dentro del recorrido del parque.